Los vecinos de Conxo, en el entorno de Ponte Vella de Arriba, están desesperados. En los últimos días han aparecido nuevas pintadas con diferentes indicaciones, y el mojón que colocó el colectivo vecinal ha vuelto a sufrir una agresión. Como consecuencia, desde hace días los peregrinos se desvían del que, a su juicio, es la entrada a Santiago del Camino Portugués.
Todo lo vinculan al boicot de un hombre que vive en las inmediaciones y que también ha tenido diferencias particulares con otros vecinos. Estos han acudido al juzgado y han pedido la intervención del Concello, que ha limpiado parte de los estropicios, pero el problema sigue latente.
El presidente de la asociación, Luis Matos, no quiere entrar en determinadas situaciones concretas que se han dado entre varios vecinos y esta persona, pero reclama que al menos el Ayuntamiento haga cumplir sus propias normas y multe al que hace una pintada en el Camino de Santiago «igual que lo hacen cuando cazan a los grafiteros». Matos asegura que en la última semana los peregrinos han desaparecido del barrio «con el perjuicio que conlleva».