El Ayuntamiento de León ha rechazado dos ofertas sin ánimo de lucro para reabrir el albergue de peregrinos del CHF, con lo que la ciudad seguirá siendo la única capital de provincia del Camino Francés sin un lugar público de descanso para quienes realizan la ruta jacobea a Santiago de Compostela.
El albergue cerró el pasado mes de junio dentro de la reorganización interna del Ayuntamiento y conllevó el despido de sus nueve trabajadores.
Las dos ofertas han sido presentadas por la propia Federación de Amigos del Camino de Santiago y por Proyecto Joven, una ONG que recientemente se ha hecho cargo del de Villadangos del Páramo. León mantiene una oferta privada para hospedaje en las Carbajalas y la residencia del Ademar, en la avenida Miguel Castaño, lo que eran antes las instalaciones de los Franciscanos. De todas formas, el número de camas es insuficiente en los meses con mayor número de peregrinos (junio, julio, agosto y septiembre). Desde Mansilla no hay otro albergue público hasta La Virgen del Camino. Cada año pasan por León más de 25.000 peregrinos.
El presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago ‘Pulchra Leonina’, Luis Gutiérrez Perrino, desconoce los motivos que han llevado al Ayuntamiento a rechazar las dos iniciativas, pero sí confirma que se han hecho. «No lo entendemos», se lamenta.
«Ambas eran interesantes y suponían reabrir las instalaciones», explica. En el caso del proyecto de la Federación, la organización que reúne a todas las asociaciones de amigos del Camino de Santiago, se ofrecía al Ayuntamiento la posibilidad de hacerse cargo de las instalaciones con unos mínimos gastos, ya que sería atendido por hospitaleros voluntarios que se renovarían cada quince días. La Federación también se haría cargo de los desperpectos y de la limpieza.
En la provincia, son atedidos por hospitaleros los centros de Bercianos del Real Camino, El Burgo Ranero, Calzadilla de los Hermanillos, Foncebadón, El Acebo y Ponferrada. En todos ellos, según explica Gutiérrez Perrino, la contribución económica por dormir es voluntaria, ya que se mantiene el espíritu medieval de cuando surgió la peregrinación a Santiago. En el caso del Proyecto Joven, el precio es también simbólico, menor en cualquier caso que la oferta privada.
La Asociación de Amigos de León no se muestra en contra de que haya otro tipo de establecimientos, pero cree «debería haber también uno público, como hay en Pamplona o Burgos».
«El Camino no puede perder su espíritu jacobeo. Es innegable su desarrollo económico, pero no puede perder su esencia», insiste Gutiérrez Perrino.
Fuente: Diario de León