La Justicia ha despejado todavía más las obras para el recrecimiento de Yesa. La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo desestimó ayer el recurso de casación que el Ayuntamiento de Artieda había presentado en contra del proyecto por considerar que supone inundar un tramo del Camino de Santiago, catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1993.
La sentencia del alto tribunal considera que prevalece la declaración de interés general del proyecto de recrecimiento del embalse de Yesa, que requiere la elevación de la presa actual, y señala que la ruta jacobea puede desviarse con el fin de eludir el paso por la zona que se inundará, entre la localidad de Artieda y el pueblo deshabitado de Ruesta.
Asimismo, las ermitas que se verán afectadas, de estilo románico, deberán desmontarse y trasladarse al nuevo trazado del Camino de Santiago, que discurrirá más alejado del embalse.
«No entendemos que un bien cultural que está en la lista de la Unesco pueda cambiarse de sitio como si tal cosa», subrayó ayer Javier Giménez, alcalde de Artieda. «Esto demuestra que los intereses de las grandes empresas de construcción están por encima de nuestro patrimonio cultural», añadió.
Con su decisión, la sentencia del Supremo ratifica una sentencia previa de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Aragón y, además, impone las costas del proceso al Ayuntamiento de Artieda.
El recurso de casación se basaba, entre otros puntos, en que la DGA fijó una nueva delimitación del Camino de Santiago una vez iniciadas las obras de recrecimiento del embalse Yesa.
Para Giménez, resulta extraño que el Camino se proteja en otros tramos, como el comprendido entre Martes y Mianos, donde corre paralelo a una nueva carretera que no lo toca, pero, por el contrario, «se cambie arbitrariamente su trazado en otros puntos del recorrido».
Fuente: elperiodicodearagon.com