
Se llamaba Michel Laurent, y no era inglés sino belga, no iba sin pertrechos, ni solo, pero el 4 de Septiembre pasado la muerte lo esperaba a la subida de El Calvario, a apenas dos kilómetros de Almadén de la Plata, o quizás Santiago decidió buscarle un atajo para llevarlo cuanto antes a la Casa del Padre y que descansara en su regazo.
Y el pasado sábado, como manda la tradición jacobea y la caridad cristiana, casi medio centenar de peregrinos, autoridades de Almadén de la Plata, el Padre Luis María Hernández, y la guardería forestal (que atendió al peregrino desde poco después de su fallecimiento hasta casi el anochecer), se congregaron en el lugar del suceso para, acompañados por su familia, que vino expresamente desde Bélgica invitados por esta Asociación, honrar la memoria del peregrino.
Fue un acto entrañable, íntimo y pleno de emociones, que ya tuvieron su prolegómeno la noche anterior, cuando compañeros de la Junta Directiva recogieron a la familia y la acompañaron a su alojamiento mientras les informaban sobre cómo sucedió todo, gracias a la presencia, en todo momento, como traductor de nuestro amigo Antonio Céspedes, Comendador de la Encomienda Santiaguista de Villanueva del Rio. Representados por nuestro Vicepresidente, Manuel Oliva, que agradeció la presencia de todos y enmarcó el momento con el bello poema machadiano «Caminante, no hay Camino», la Alcaldesa de Almadén, Felicidad Fernández, mostró la consternación del pueblo ante el recuerdo de lo acontecido, y el Padre Luis procedió al responso por el fallecido. La familia, representada por Jacques Laurent, hermano de Michel, Benjamín, su hijo, y Virginie, pareja de este último, solo pudieron mostrar su más sincero agradecimiento a todos los presentes, pues la emoción los desbordada.
Una vez descubierto el monolito en su memoria, continuaron la etapa hasta Almadén, donde, tras una almuerzo de confraternidad, la familia regresó a Sevilla, para al día siguiente volver a sus hogares en Bélgica, mostrando a cada paso su más sentido agradecimiento a la Asociación y a todos los peregrinos y personas que han colaborado en este acto de recuerdo. Descanse en paz Michel y que él nos allane el Camino.